Dancing hands
BCN, 1998.
Las dos manos pertenecen a la misma persona. El mensaje que quise transmitir era que, cuando estemos solos, no nos sintamos en soledad, ya que estamos con nosotros mismos y no hace falta más para ser feliz.
Cámara: Mamiya RB67 PRO-S con objetivo de150mm
299 € – 1.118 € IVA incluido